viernes, 9 de marzo de 2012

Mendigar un beso, dos maletas y un hasta luego.



Hola, nuevamente estoy aquí. Bueno siempre estuve lo que no publiqué. Ahora vuelvo como siempre con ganas, como siempre después de tener mi corazón rotos en mil pedazos, aunque esta vez tan solo está roto en dos. Después de mi noviazgo de siete meses y algo más  con Mr. Ice, ahora vuelvo a estar sólo y con mi literatura.
Ahora todo vuelve a ser como antes... O mejor dicho creo que esta vez si que hay algo que ha cambiado. Con 27 años algo he ma durado, está vez no han habído gritos, ni lamentos, ni malas caras... tan solo una conversación madura de dos adultos que por mucho amor que hubiera, no pueden continuar haciendo el camino de la mano.
Además esta vez evité volver a la protección de los brazos maternos, por primera vez iba a ser totalmente independiente. Estoy afrontando los problemas de cara.
Así que he decido quedarme en Sitges y empezar de nuevo por mí mismo.
Ya que Sitges me ha regalado los mejores siete meses en mucho tiempo, yo ahora le voy a regalar en forma de blog, las aventuras e historias de sus calles, de sus gentes, de sus cafés, de sus fiestas etc...
Después del miércoles negro, llegó el jueves negro y más tarde fue el viernes oscuro.
Cuando las palabras fueron I don’t know if I love you, mi vida se derrumbó. (más tarde supe que me quería pero más quería su independecía y su vida).
En ese mismo instante pensé en irme a Londres a vivir, pero luego comprendí que necesitaba saber si Londres iba a ser el punto de salida o de llegada.
Así que la solución fue que Londres sería el punto de llegada, por eso tuve que buscar un piso rápidamente porqué en cinco días empezaba a trabajar y necesitaba estar ubicado.
Ahora empiezo una nueva vida, nuevo trabajo, nuevas ideas y como siempre las viejas intenciones de mantener vivo un blog, como fue Cómo ser gay y no morir en el intento.
Ah si me olvidaba y seguir buscando el verdadero gay-amor, cada vez más difícil pero no imposible.
Nadie se esperaba esté drámatico final (ni yo mismo) pero era una muerte anunciada. Él es puro hielo y yo soy puro fuego.
Ahora bien,  lo que yo si que no sabía fue la sensatez y madurez con las que me tomé la situación.
El jueves negro lo pasé sentado en el Paseo de la Riviera, poniendo historias a la gente que pasaba y escuchado es voz interna que tanto odiamos a veces. Fue entonces cuando decidí volver a mi lápiz y papel.
Y cuando llegó el viernes oscuro ya tuve que dar el paso firme. Y un gay en Sitges ya es una realidad como lo es que ya nunca más escucharé su Hallo Liebe.

Carrión.

3 comentarios:

  1. Comenzamos tu historia...

    Un saludo.
    detroy114.blogspot.com

    ResponderEliminar
  2. Así es comenzamos mi historia ahora solo falta saber cómo acabarla.

    ResponderEliminar
  3. espero que bien, consiguiendo las metas y esperanzas, y saliendo del dolor, cuesta... pero se sale. :)

    ResponderEliminar